La planificación es una herramienta imprescindible para la acción de marketing y por tanto también se convierte en una misión importante de la logística.
En cualquier actividad económica se siguen las mismas pautas generales del ciclo de planificación de la empresa, podemos distinguir tres niveles de planificación:
- Planificación estratégica.- Se identifica con el plan de Marketing, dentro del contexto de una política de revisión producto mercado. La intención no es otra que la de definir a un plazo más o menos largo:
- Gama de productos que vamos a comercializar.
- Participación y segmentos de mercado a los cuales vamos a atender con una determinada política de servicio
- Conocer las inversiones que tenemos que realizar para conseguir los objetivos de Marketing.
- Planificación táctica.- Tiene como finalidad fundamental disponer o hacer operativos los recursos creados. El horizonte del planing hemos de situarlo en un plazo medio, normalmente medido en términos de meses. Las inversiones a realizar aquí por su naturaleza son de inferior cuantía, y desde luego implican un riesgo menor.
- Planificación operacional.- Esta ligada directamente al control del flujo de materiales, siendo su objetivo fundamental el conseguir una utilización eficiente de los recursos empleados, su horizonte es siempre a corto plazo(semanas) ya que sus operaciones van ligadas a conceptos tales como programación de aprovisionamientos, gestión de inventarios, tráfico de mercancías, planificación de la mano de obra etc.
La planificación operacional, va ligada a un programa de Indicadores de gestión, para controlar si la realidad se desarrolla de acuerdo a los planes previstos, efectuándose las correcciones oportunas a dichos planes con revisión si es necesario de las estrategias correspondientes.
El proceso de planificación estará basado en un sistema de previsiones, calculado o bien como una extrapolación histórica de cifras corregida de acuerdo con las tendencias previsibles del mercado, o bien mediante estimaciones subjetivas del nivel de actividad previsto para el futuro.
Cualesquiera que sea el método empleado, hay que tener en cuenta lo siguiente:
- El nivel de agregación de datos debe ser mayor en la medida en que aumenta el horizonte de planing, así, normalmente en la planificación estratégica, se trabaja con cifras globales del negocio.
- A efectos de la planificación logística, estas cifras hay que transformarlas en términos de unidades operativas (kilos, metros cúbicos, cajas, pallets, etc.)
La herramienta que habitualmente se utiliza para la transformación y extrapolación de datos son los promedios y ratios estadísticos de la empresa.